domingo, 19 de abril de 2009

Vacaciones pagadas

En épocas de crisis, se agradecen actos de generosidad como el que el primer ministro italiano Silvio Berlusconi tuvo la pasada semana con las más de 27.000 personas de la región italiana de los Abruzzi. Y es que, a los que no tenían plan para semana santa, Berlusconi les regaló la estancia a tiempo indefinido en un camping.

Lejos de la tragedia y de las 260 personas que han muerto a causa de los terremotos ocurridos, el primer ministro italiano, ha recomendado a los miles de ciudadanos evacuados a causa de la catástrofe que se tomen su estancia fuera de sus casas "como un fin de semana en el camping". "No les falta de nada.”, añadió, “Tienen cuidados médicos, comida caliente...”

Después de semejante barbaridad, mi cabeza ha empezado a recordar los disparates que son capaces de decir los altos mandatarios de este, nuestro mundo, cuando no llevan un discurso preparado por un especialista. No hace falta remontarnos muy lejos en el tiempo para encontrar deslices del calibre del del primer ministro italiano, aquí en España, por ejemplo, el pasado mes de febrero, el ya ex ministro de economía Pedro Solbes respondía a la pregunta de si le envidiaba algo al ex ministro Bermejo, que sí, que le envidiaba el hecho de ser ex ministro. Esto, por no hablar de las perlas que nos ha dejado el actual embajador español en Turquía, Joan Clos, que entrando en el gobierno como ministro de industria, juró el cargó como ministro de justicia o que en una conferencia en la sede española de General Motors habló como si en la empresa Ford estuviera.

Viendo meteduras de pata como estas, mi cabeza me obliga a plantearme la pregunta de si realmente nuestros mandatarios son personas de un cierto nivel cultural (ya no pido más).

Sinceramente, no lo creo. Estoy seguro de que están apoyados por ingeniosos y complejos equipos con gente que realmente vale para la política (quien, aun así, son incapaces de controlar caballos desbocados como Clos). Pero, viendo su comportamiento cuando no tienen respuestas o discursos preparados, más de uno debería replantearse su profesión. No es de extrañar que estemos en crisis cuando la gente (no sé si llamarlos personas) que guía nuestras vidas hacia la prosperidad y la alegría demuestran esta agudeza intelectual.

Así que ya lo sabemos, si la próxima semana santa queremos ir de vacaciones pagadas, sólo nos hace falta convencer a ZP…

1 comentario:

Teresa dijo...

Nasi:
Una vez más, una muy buena redacción de la que sólo tengo que corregirte ese "del del" que debes evitar construyendo la oración de otra forma.
No sé si este será mi último comentario, espero que no, que presentes el último texto, pero por si acaso (¡gandúl!)no quiero acabar sin reconocer que estoy un poco triste porque sé que tardaré en volver a leer comentarios tan bien redactados como los tuyos (cuando pones un poco de ganas y trabajas). ¡Mucha suerte y estudia más!