domingo, 6 de abril de 2014

Educados para NO pensar

Sinceramente, no tenía la menor idea de quién era José Luis Sampedro hasta que vi el video e investigué un poco su biografía en Wikipedia. Sin embargo, sus palabras por pocas que hayan sido han calado dentro de mi mente de una forma impensable.

Y es que este hombre tiene toda la razón del mundo. Estamos educados para no pensar; para no pensar en lo que nos conviene a los ciudadanos como conjunto; para no pensar en lo que está bien y lo que está mal para que podamos vivir en paz; para no pensar en lo dañinas que están siendo todas las situaciones que vivimos diariamente; para no pensar por nosotros mismos.

En el video se habla de la democracia, democracia y como se ha hecho un mal uso de ella. La democracia no existe, ni en Europa, ni América ni en ningún lado. ¡Nos hacen creer que existe! Personas como los políticos son los encargados de hacernos creer mediante los medios de comunicación que la democracia existe, que hay justicia, que todos son muy honestos y que están limpios de todo pecado.

Según la Real Academia Española; la democracia se define como una doctrina política favorable a la intervención del pueblo en el gobierno o como el predominio del pueblo en el gobierno político de un Estado. Basándome en estas definiciones y en la posición de la democracia puedo decir con absoluta seguridad que las palabras de Sampedro son totalmente ciertas. Vivimos rodeados de mentiras, una detrás de otra, bombardeados por los medios de comunicación, como dice Sampedro, sin saber cómo pensar racionalmente.

Una cosa con la que estoy totalmente de acuerdo con el señor Sampedro es que los ciudadanos estamos educados para pensar visceralmente y no racionalmente. Si estuviésemos educados para pensar como es debido para algunas cosas como por ejemplo la elección de un nuevo presidente, etc, otro gallo cantaría. Pero sucede una cosa muy popular últimamente, que cuando nuestra sociedad generalmente conformista se da cuenta que la están engañando y abusando de ella, se sublevan.

Pero una manifestación o cualquier otro tipo de “batalla” no servirá para cambiar las cosas aunque, estas revelaciones hay que hacerlas por el mero hecho de hacerlas, para que los que mandan sepan que a los del pueblo no les gusta un pelo como están siendo tratados y poco a poco, las cosas cambian.


Al principio de la redacción tenía muy claras dos cosas: la primera que los ciudadanos de este mundo somos unas marionetas incapaces de ver más allá de sus ombligos y que cuando hay alguien que ve más allá, se intenta desacreditar, tapar, olvidar. Y la segunda, que Sampedro ha conseguido que me plantee muchas cosas y que, debo aprender a pensar. 

1 comentario:

Teresa dijo...


Me gusta mucho lo bien estructurada que está tu crítica; me permite ver con bastante claridad todo el proceso de tu razonamiento.
Sin embargo, puedes mejorar la redacción porque hay algunos errores en la construcción de oraciones ("ni en Europa, ni América ni en ningún lado" donde falta un "en" delante de América; o "como están siendo tratados y poco a poco, las cosas cambian" donde hay un uso inadecuado del modo verbal pues deberías emplear el subjuntivo "cambien" y una falta de ortografía en "como").
Finalmente, evita construcciones léxicas que se han hecho tópicas de tan usadas y que, además, le dan a tu texto una vehemencia y grandilocuencia retórica e innecesaria ("Basándome en estas definiciones y en la posición de la democracia puedo decir con absoluta seguridad que las palabras de Sampedro son totalmente ciertas.") que choca con el coloquialismo de expresiones como "no les gusta un pelo".