martes, 26 de febrero de 2013

¿Las grandes superficies o el pequeño comercio?


El capitalismo, nuestro actual sistema económico, social y político, porque aunque sea negado este afecta directamente a todos los aspectos de nuestro día a día, basa su funcionamiento en el beneficio, en la especulación, en la filosofía de “el depredador depreda”, una especie de copia de la selección natural  en que el más grande, fuerte y poderoso es el que sobrevive y lo hace a costa del pequeño.

Nuestra sociedad funciona según estos modelos, nadie puede impedirlo a esta alzada de la película, nuestro mundo se mueve según los grupos elitistas deciden que debe y como buenos elitistas, son propietarios de multitud de empresas, grandes empresas, de las que depredan. Viven para ser aún más selectos y tener más poder, esta es su único fin así que aprovechan cualquier vía para llegar a ello.

Un gran ejemplo de esta filosofía la encontramos en la rápida extinción que están experimentando los comercios pequeños, las tiendas de barrio, aquellos que en catalán llamaríamos tienda de “queviures”. Este tipo de negocio se ha visto anonadado por la rápida propagación de las grandes superficies comerciales y por la competitividad que ofrecen sus productos. Nadie puede hacer frente a sus rompedores precios que rozan la línea de la indecencia, hay quienes llegan a vender por debajo del precio de coste mediante chanchullos diversos.

Los pequeños comercios no tienen nada que hacer más que esperar su quiebra. Iba a decir lenta fin pero casi que no, esta será rápida, muy rápida. La mayoría de sus clientes se caracterizan por haber vivido como mínimo la posguerra. Es demasiado cómodo y económico utilizar las grandes superficies como lugar de compra, personalmente solo he utilizado el pequeño comercio en ocasiones de alta necesidad como cuando te faltan huevos y estas a diez minutos de la llegada de tus huéspedes. 

1 comentario:

Teresa dijo...

Correcto, Aitana aunque con algún error:
Catalanismos como "a esta alzada de la película" que debes sustituir por algo como "a estas alturas".
Lenguaje demasiado coloquial a ratos: "pero casi que no".
Lo peor está en el contenido, y es la incoherencia de atacar todo el rato el sistema que mantiene a las grandes superficies para acabar diciendo que tú no compras nunca en pequeños comercios (o..¿es que consideras que formas parte de esos grupos elitistas que deciden que debe?.)