miércoles, 19 de septiembre de 2007

La castración química en los violadores, ¿Pena o terapia?

Hace unos días oíamos repetir al vicepresidente de la Generalitat el discurso que el día antes había pronunciado el presidente francés, Nicolas Sarkozy, sobre la posibilidad de utilizar la castración química cómo medida penal contra los violadores.

El proceso de castración química se basa en un tratamiento hormonal que inhibe el deseo sexual mientras se tome la medicación. En el momento en que esta deje de ser ingerida se podrá retomar la vida sexual con total normalidad.

Ahora bien, aún que sea así, ¿es ético aplicar la castración química a los violadores? Y otra pregunta quizás más importante ¿es útil?

En el primer momento creeríamos que sí, que apagando el deseo sexual de esta persona conseguimos lo que buscábamos. Éste no volverá a violar, y no hará ningún otro daño a la sociedad, muerto el perro, muerta la rabia. Pero hay que tener en cuenta otro factor, alguien que ha violado, puede ser, y creo que no es muy extraño, una persona con un trastorno grave, de naturaleza violenta o totalmente irreflexiva. Una vez que esta persona haya cumplido su pena de cárcel y salga sometido a un tratamiento de castración química puede haber acumulado un gran odio dentro de él. Odio a la sociedad, que lo ha tenido encerrado y que ahora encima le impide de llevar una vida sexual normal, odio a la persona que lo denunció, odio al juez que lo encerró. En este caso utilizar la castración química no sería muy útil, pues esta persona podría canalizar su odio aumentado en, por ejemplo, matar a una de estas personas que tanto daño, a su parecer, le han hecho.Esto sin contemplar que ha habido casos de reincidencia en violación aún y haberse usado la castración no química sino física. La misma consejera de justícia (la polémica Montserrat Tura) dijo el dia 13 de este mes en una entrevista en la emisora RAC1 "La castración química no solo no ha acabado con la reincidencia, sinó que hay casos de castración física en los que también ha habido reincidencia." Siendo cierto que son excepciones, esto me permite afirmar aún con más certeza que la castración química no es una pena útil para la sociedad.

Aún así tenemos otro caso a comentar. Es sabido que muchas veces, los violadores son personas que no supieron controlar su instinto, y que al salir de la prisión deciden, voluntariamente, recibir ayuda psiquiátrica. Así, estas personas hacen tratamientos para evitar volver a cometer semejante error. En este caso la castración química sería muy útil pues estamos frente a una persona que lo que quiere es recuperar la normalidad, y que por lo tanto ha decidido dejar su odio a un lado para progresar en este camino hacia reinserción social. Esta persona ya no vería la castración cómo un castigo si no cómo una ayuda para alcanzar su objetivo. Aun así no hay que pensar que esto sería suficiente, sino entenderlo cómo un buen complemento para la terápia, que en cualquier caso es lo verdaderamente útil para recuperar la normalidad en todos los sentidos.

Por lo tanto, por el bien de la sociedad, la castración química debe reducirse a una parte de la terápia, pues no es útil usarla cómo pena.




PD: Tere cuando hagas la corrección dime si te parece bien este tipo de texto un poco más libre o sería mejor ceñirse a la estructura típica del texto argumentativo (introducción, tesis, argumentos, tesis)

1 comentario:

Teresa dijo...

Quim:
Te puede parecer que tu texto no responde a la estructura típica pero no es cierto, tienes una parte introductoria, un cuerpo argumental y una breve conclusión y además esta estructura está marcada claramente.
Tu comentario está muy trabajado y es evidente tanto en el contenido como en la forma (hasta en el detalle de utilizar un refrán bien castizo como el del perro y la rabia). Tus errores son muy puntuales, básicamente faltas de ortografía ("aunque" va junto y sin acento, "le impide de llevar" no lleva "de", faltas de acentuación en "sino", "como", "terapia").
En conclusión, muy buen comentario y no te preocupes porque el resultado sea más libre siempre que sea la espontaneidad y naturalidad de lo que se ha trabajado como en este caso.