lunes, 18 de octubre de 2010

La selectividad.

Este año, estoy cursando segundo de bachillerato. Yo y todos los alumnos que nos encontramos frente a esta situación, a finales de este curso tendremos que enfrentarnos a la selectividad.
La selectividad consiste en realizar una prueva escrita ( y pasarla, a poder ser) de cada una de las materias que hemos cursado durante el Bachillerato.
Esta prueva es importante porque las notas obtenidas en la selectividad junto con las notas de bachillerato decidirán si estamos suficientemente capacitados para entrar en la universidad.
Y esto no es todo, hay algunos grados que tienen una alta demanda, pero la oferta no puede satisfacer a todos quienes quieren entrar en dicho grado.
Dado que la selectividad consiste en pasar todos los exámenes en tan sólo tres días, a menudo los estudiante no pueden mantener el rendimiento intelectual, y las notas de selectividad provocan que su media educativa disminuya.
Por este motivo, muchos alumnos se juegan en la selectividad la entrada al grado que quieren cursar, y en caso negativo, tendrán que elegir otro grado y consecuentemente otro futuro.
A menudo, se oye que la selectividad esta mal formulada, porque somete a los alumnos a una alta presión, y, como ya he nombrado anteriormente, el rendimiento de los alumnos puede verse afectado, además que los nervios pueden jugar una mala pasada al estudiante.
No obstante, opino que la selectividad es un buen método de someter a todos los estudiantes bajo las mismas condiciones y comprobar si tienen la suficiente madurez y los conocimientos necesarios para entrar en la universidad y comenzar una nueva etapa en su vida académica.
Como todos los alumnos, tan sólo pensar en la selectividad me corre un miedo y unos nervios que me hacen temblar, pero me consuela pensar que casi todos los alumnos que se presentan (90% aproximadamente) consiguen aprobarla, y tan solo depende de mi trabajo día tras día el hecho que pueda sacármela para poder entrar en el grado que escojan.
Mi caso es un poco complejo porque aún no tengo claro cual será el grado que yo cursaré, así que necesito sacar las mejores notas que pueda para no encontrarme con problemas a la hora de elegir.
A pesar de todo, la selectividad tan sólo es una prueba mas en nuestras vidas, y por lo tanto debemos afrontarla con la máxima madurez posible.

1 comentario:

Teresa dijo...

Natalia:
Has escrito incorrectamente la palabra "prueba" excepto al final del texto. Tampoco pones la tilde a "sólo", otro error morfológico es emplear "bajo" cuando debe ser "a" en "someter a los alumnos a las mismas condiciones".
Excepto estos pequeñor errores de estilo, el texto está muy bien.