lunes, 2 de mayo de 2011

Osama ha muerto.

Las primeras horas tras el anuncio de la muerte de Bin Laden, televisiones y sitios 'web' de todo el mundo extendieron la imagen del supuesto cadáver de Bin Laden.
A las ocho de la mañana, hora peninsular española, la fotografía deun hombre barbado y de rictus congelado en un posible gesto de dolor era dada por buena por los medios de todo el mundo.
La fuente era la televisión pakistaní 'Geo', que dijo que la imagen se la había facilitado el Ejécito de su país. Tan sólo minutos más tardecomenzó a ser retirada de aquellos sitios que la habían publicado por las dudas que surgían acerca de su autenticidad.
En cuestión de dos horas, el engaño quedó al descubierto. El Photoshop fue utilizado esta vez para simular el cadáver del hombre más buscado del mundo.
La manipulación ha partido de una de las imágenes ya conocidas de Bin Laden, tomada en 1998. De ésta ha sido cogida la barba y los labios. La parte superior del rostro corresponde a una segunda imagen, tal como se muestra en la composición que acompaña a esta noticia (tercera por la izquierda).

Todo ello, sin mencionar que no han exhibido el cadáver a los medios de comunicación, el cual lanzaron al mar pocas horas después de su muerte.

Modus operandi. Bin Laden habría recibido varios disparos en la cabeza. Posteriormente, los efectivos de EEUU lo habrían llevado hasta Afganistán en helicóptero con la intención de cotejar el citado ADN, y posteriormente habría sido lanzado al mar cumpliendo la práctica musulmana.

Ahora bien... ¿hay mar en Afganistán? ¿Lanzar un cadáver al mar forma parte del ritual islámico? Pues ninguna de las dos cosas. En todo caso, el cuerpo de Bin Laden habría sido lanzado desde las costas de Pakistán y arrojarlo al mar que contradice la ley islámica. Varios expertos de Centros de Estudios islámicos han puesto el grito en el cielo tras estas informaciones difundidas por los medios estadounidenses. Esta práctica se reserva para situaciones excepcionales -por ejemplo, cuando el fallecimiento se produce en un barco-, pero el ritual clásico exige enterrarlo igualmente. "Parece ser que, después de meter la pata cuando mencionaron que lanzar un cadáver al mar, formara parte del ritual islámico, los estadounidenses, tienen eligieron otros pretextos mencionando que les hacía temer que, el cuerpo de Osama, se convirtiera en un lugar de peregrinaje", ha declarado Abdel Moti Bayumi a la agencia EFE. No obstante, y para ensombrecer las intenciones y el transcurso del proceso, un oficial de defensa estadounidense ha informado de que le han dedicado un pequeño funeral religioso en el portaviones del helicóptero antes de ser lanzado y han justificado la decisión alegando que ningún país quería acoger su entierro. ¿Quién se quiere creer eso? ¡Obviamente nadie! Pero qué mejor lugar para ocultar un cadáver que nunca existió. ¡El mar! De haber simulado un entierro, hubieran corrido el riesgo de profanar su tumba para encontrar un ataúd vacío.

Además, todo ello, en el transcurso de 5 horas, en el que la operación tuvo una duración de 40 minutos y, de ahí, trasladar el cadáver en helicóptero desde Islamabad, hasta la orilla más próxima al mar que se encuentra a más de 1.100Km, sin mencionar que un portaaviones puede encontrarse a unos 200 km de la costa, lo que suma, aproximadamente, un total de 1.300 Km desde el lugar que tuvo el conflicto. Es decir, el helicóptero más rápido del mundo, llegaría con el tiempo justo para aterrizar en el portaaviones y, de ahí, realizar un funeral fugaz sin dar ninguna prueba de la existencia de éste hecho. El cadáver de Bin Laden habría sido un trofeo para los EE.UU., el cual, hubieran expuesto ante todos los medios de comunicación, una vez que el helicóptero se encontrara a salvo en el navío estadounidense y, la única prueba que han aportado es la de una fotografía trucada.

Otra cosa más. ¿Dónde están los cuerpos de su hijo y su esposa, la cual utilizó como escudo humano? Tampoco se sabe nada sobre ello ni hay pruebas que lo demuestren.

1 comentario:

Teresa dijo...

Vale, Natalia, está bien escrito pero, si no lo escribes tú no te va a servir de mucho.