domingo, 22 de marzo de 2009

Y mira que me gusta...

En este año 2009 que hace unos tres meses que ha empezado hay dos temas básicos de conversación. Uno de ellos es la famosa crisis, de la que, de tantas veces que lo he hecho, no tengo ganas de hablar. El otro es el fútbol. Cada año se habla de fútbol. Pero me da la sensación que este año aún más. Y mira que me gusta…

No sé si es por la gran temporada del Barça, por los líos merengues o por las secuelas de la victoria española en la Eurocopa el pasado verano, pero el caso es por más que le guste, uno se cansa. Cada día en los telediarios duran más las secciones deportivas cuando tenemos, des de mi humilde punto de vista, otros problemas más importantes que solucionar.

Pero, señoras y señores, el dinero es el dinero, y el fútbol proporciona mucho. No da dinero hablar de la crisis, del cambio climático o del hambre en el tercer mundo. Esto demuestra el compromiso del pueblo español. Es más fácil y distraído sentarse a mirar el partidito de los domingos que dedicarse a reciclar, a colaborar con alguna que otra ONG o, simplemente, mirar en el telediario lo mal que va nuestro mundo. Porque nuestra sociedad se mueve así, por la facilidad, por la distracción, y es que por algo los españoles fuimos los inventores de la siesta, nos encanta (me incluyo) no hacer nada.

Aun así, esto no quita que nos estemos pasando con el tema del fútbol. Incluso un aficionado al fútbol, como lo soy yo, que además es culé y todo le va bien este año, puede ver que esto pasa de castaño oscuro. El sentimiento de impotencia crece cuando uno ve que cada vez se mueve más dinero en el mundo futbolístico cuando podría ser destinado, a paliar la famosa crisis, a incentivar el uso de las energías renovables o a construir casas y llevar medicamentos a los países pobres.

Y es que, sí señor, como dijo el poeta: “España va bien”, o por lo menos hasta que duren las alegrías deportivas y siga funcionando la ley del mínimo esfuerzo.

1 comentario:

Teresa dijo...

Sí, Nasi:
Para una persona que no disfruta mirando fútbol, el aluvión de información (y desinformación, porque se dedica tiempo y espacio de los medios de comunicación a cualquier banalidad relacionada con el mundo futbolístico o, incluso, se inventa la noticia)que recibe: informativos, publicidad, partidos en directo, partidos en diferido, el antes y el después del partido, programas de humor,...no puede considerarse menos que un intento de manipulación malintencionada de su mente.Me parece que algunos poderes fácticos escondidos tras los medios de comunicación han refinado el romano instrumento del "panem et circenses" y además de distraernos con espectáculo nos están adocenando, eliminando nuestra capacidad crítica con el bombardeo de una única opción que es falaz. ¡Nosotros sí que somos más que un club!