jueves, 2 de octubre de 2008

Hay crisis, es evidente.

Ancestralmente, la riqueza de un estado era directamente proporcional a la cantidad de oro que éste tuviera en sus arcas.
Más o menos en los años sesenta, es cuando los bancos, que aún son empresas que se juegan sus fondos en sus grandes movimientos financieros, piden a las grandes organizaciones políticas internacionales, a las que pertenece el país donde están las cedes de estas empresas, que creen unos organismos monetarios que en caso de fraude o bancarrota les dé una inyección de capital para saldar la crisis. Así es como aparecen grandes instituciones monetarias como el Banco Mundial, el Banco Europeo, el Fondo Monetario Internacional, entre otros.

Sin embargo, la pregunta es: ¿por qué los bancos de entonces se sintieron en el riesgo de una banca rota?
De respuestas a la pregunta anterior pueden haber muchas pero la más evidente y real es la que ha provocado la crisis que está sufriendo la economía mundial actualmente. Los protagonistas y también antagonistas de la historia son los bancos, digo que son los protagonistas porqué es a éstos a los que recae la acción, pero también son los antagonistas porqué son estos mismos los que se crean recíprocamente la acción problemática.
Y es que los bancos, a partir de la década de los sesenta, empiezan a crear el dinero ficticio, es decir, dinero que tiene un valor real pero que no existe.

Esto en su momento representó una solución a la prestación de créditos por parte del banco a sus clientes y es que el banco había prestado tantos créditos que ya no tenía dinero líquido, pues no podía haber parado de dar créditos ya que habría perdido dinero. Hasta aquí todo funciona, el problema aparece en cuando las personas quienes recibieron créditos del banco no devuelven el dinero, las medidas del banco recuren a la justicia, la que decide imponer el embargo como principal medida antimorosos, por consiguiente, y si nadie devuelve el dinero al banco, nos encontramos con una entidad monetaria que no tiene monedas sino objetos y emplazamientos que no son intercambiables materialmente por dinero en metálico, en este punto, el banco se encuentra en una calle sin salida ya que sólo que una persona quiera sacar su dinero del banco, éste no se lo puede dar.

Éstos problemas son la principal causa a la que están sometidos actualmente casi todos los bancos del mundo y es por estos problemas que no solamente los bancos sino toda la humanidad está siendo empujada por una gran pared mecánica inesquivable hacia un abismo económico mundial.

1 comentario:

Teresa dijo...

Josep Maria:
Pelín dramático tu final.
Tienes varias faltas de ortografía, prueba a encontrarlas con el corrector.
También hay alguna palabra empleada incorrectamente como "calle sin salida" cuando la expresión hecha es "callejón sin salida";tampoco es correcta ni coherente la oración "Estos problemas son la principal causa a la que están sometidos los bancos"( no sé si querías decir que estos problemas son la causa de la crisis financiera pero, no es lo que dices)