jueves, 30 de octubre de 2008

Hvala se queda!

Hace pocos días un hombre de unos 70 años tuvo que ser ingresado en el Hospital de Vielha tras ser mordido y arañado por la osa Hvala, una de las osas reintroducidas en el Pirineo por los estados francés y español, en un bosque de la zona de Portet, en Les durante una batida de caza. Estos hechos han levantado la opinión pública aranesa contra la reintroducción del oso en el Pirineo. El mismo día, el Síndic d’Aran, Francisco Boya, y el líder de CDA, Carlos Barrera, pedían la captura de la osa y el fin de la reintroducción del oso en el Pirineo.

El calificativo más leve que se puede dar a esta reacción es desproporcionada. Y antes quiero dejar muy claro que no estoy en contra de la caza. La caza es una herramienta útil para el control de plagas, cómo el jabalí en el Pallars Jussà, e incluso es una forma como otra de conseguir alimento. Estando mi dieta compuesta en parte por carne sería un acto de hipocresía condenar la caza. Pero también hay que tener en cuenta, por mucho que les pese a los cazadores araneses, que la caza es una actividad que conlleva algunos riesgos, es una lucha, con cierta diferencia de ventaja, entre humano y animal. Si somos racionales, nos daremos en seguida cuenta que no es lógico forzar otra vez la desaparición del oso del Pirineo para poder cazar en paz. Pues precisamente hablamos de reintroducción, es decir, recuperar la fauna la fauna propia del Pirineo.

Además, el bosque es de todos. O, mejor dicho, si el que habita un lugar es tiene más derecho que otro sobre él, el bosque es más del oso que del humano. Y es que los araneses no son los únicos habitantes del Valle. También osos, cabras, perdices, ardillas… Todos ellos habitan los bosques. Y para todos ellos no existe frontera alguna. Para un oso, cruzar la Bonaigua del Pallars al Valle no implica más que patearse una montaña. Por lo tanto, ni que se les retiren los osos que estén en el Valle ¿creen los araneses que un oso que se encuentre en el Couserans, en Andorra o en la Ribagorça no va a entrar en el Valle? Sinceramente, a mi me recuerda al sentido más literal de la expresión “ponerle puertas al campo”.

Otra asunto que hay que tener en cuenta es la mezcla de objetivos que encontramos en el caso. Los araneses ven en deshacerse de la osa un acto de afirmación de la realidad nacional aranesa. Les parece que la reintroducción del oso es un asunto de los gobiernos español, francés y catalán. Como decía el mismo Síndic, “nadie nos preguntó a los araneses si queríamos osos”. Los araneses han hecho un paquete de la retirada del oso, la veguería propia que esperan conseguir y el orgullo aranés. Una burbuja que se ha ido haciendo grande y que lo que más está consiguiendo es hacerles hacer el ridículo.

Resumiendo, los araneses deberían reconocer su error y aceptar la presencia de Hvala, que no hace más que enriquecer el ecosistema del Valle.
(Tere: Quizás quede un poco pelmazo la siuación inicial, pero es que me ha gustado destacar que era en la zona de Portet)

1 comentario:

Teresa dijo...

¡Bien! (Pero con signos de exclamación abriendo y cerrando el enunciado)
No hace falta decir "diferencia de ventaja" basta "ventaja" o "ventajosa para el cazador" porque en su significado ya implica una diferencia; tampoco queda muy elegante "hacerles hacer" porque es ¡cacofónico!.
Ya ves que el comentario se limita a detalles del estilo y por lo que hace al contenido encuentro a faltar algún comentario al rechazo del mundo rural a que las decisiones que les afectan se tomen en Barcelona