jueves, 28 de febrero de 2008

El túnel...

- No! No y no!
- ¿Porque no?! Quiero una explicación.
- No hay explicaciones Blanca, e dicho que no, y es que no ¿entendido?
Blanca cerró la puerta dando un portazo. Por una parte entendía la reacción de sus padres,
pero por la otra se moría de ganas de desobedecerles, no podía ser la única que faltara a esa
escursión; el túnel... si, era un lugar peligroso, pero le atraían las emociones fuertes.
Salió de casa temprano, había quedado con Marta y los demás en diez minutos, debía darse prisa;
tenían que llegar antes que amaneciara a la roca de Piedra-Santa y de allí partir asta el acantilado
donde se encontraba el famosos Túnel.
- Veo que al final tus padres an decido- dijo Marta cuando la vio llegar
- Bueno... el caso es que no saben que estoy aquí. Así que, espero poder llegar antes de que se den cuenta
de que no estoy.
- Por es no hay problema! Si todo sale como tiene que salir, en unas horas estaremos de vuelta.
Blanca suspiro aliviada, aunque comenzaba a invadirle un mal presentimiento.
El camino hasta Piedra-Santa fué en un cerrar y abrir de ojos; habían caminado una hora y todavía les quedaban dos mas asta llegar a su destino, Blanca pensó que sus padres estarían a punto de levantarse, era mejor darse prisa.
Comenzaba a amanecer; pero el tiempo no mejoraba, las nubes no se marchaban y había comenzado a soplar un aire frío y pesado que les dificultava la visión, y Blanca comenzaba a arrepentirse de haber aceptado la invitación.
- ¿Oye Marta... tardaremos mucho en llegar?
- Em.. pues todavía nos queda lo peor! Si estás cansada ahora sera mejor que te des media vuelta y regreses a casa, pero piensa que vas a perderte lo mejor!
- No... no me quedo- contestó Blanca suspirando, no quería parecer una miedica.
Llegaron al final del camino, de lejos se dejaba ver la oscura entrada al Túnel; daba mucho respeto... las olas picaban cerca de las paredes y el sendero estaba abarrotado de hierbas y tierra mojada. Blanca miro a sus compañeros que sonreían, pero ella no lograba imitarles...
- ¿Te atreves?
- Si claro...
- ¿Segura? Si no estas convencida quedate aquí, en un rato salimos y volvemos al pueblo.
Blanca dudo unos instantes, no veía muy seguro ese camino, parecía que en cualquier momento iba a caerse un pedazo de tierra y llebarla directamente al mar.
- No, puedo seguir de verdad...
- Bien, en ese caso en marcha!.
Todos gritaron emocionados y comenzaron a caminar. Fango, fango y mas fango, los pies se les quedaban medio enganchados en la tierra. Blanca trago saliva incómoda; quería darse media vuelta pero estaban ya casi en el Túnel. De pronto una ola les alcanzó.
Blanca se tapo las manos con la cara para protegerse de la sal del mar, pero eso le izo perder el equilibrio; cayó al suelo y se dio contra una piedra, noto un dolor intenso en la mejilla pero pudo ver como sus compañeros gritaban:
- Marta!!
- Que a pasado?!- grito Blanca cuando se puso en pie
- Marta se a caido!- contestó uno de los chicos con las manos en la cabeza- Y ahora que acemos?!
- Como?! Pues llamar a los bomberos no?
- Pero... aquí no tenemos señal, y eso supondría que nuestros padres iban a enterarse de que estamos aquí y no podemos de echo.
- Que?- respondió ella sin acabar de creerselo- ¿Y pensais marcharos sin acer nada?
- Creo que sera lo mejor...
Todos se dieron media vuelta, Blanca les grito desesperada. No podían acer eso, Marta estaba allí y puede que mal herida, tomo el móbil y marco rapidamente el número de emergencias; contó deprisa lo ocurrido y esperó.
Los bomberos llegaron al cabo de unos minutos, tras unas horas sacaron a Marta de las rocas, se veía bastante mal, pero estaba viva y eso era lo mas importante. Blanca regresó a casa en el coche de la policía, que le había tomado declaraciones de lo ocurrido.
Sus padres se enfadaron con ella, al fin y al cabo era normal, les entendía perfectamente, y se arrapentía de haberles engañado, todo por aparentar y hacer lo que otros hacían. Suspiro profundamente... puede que regresara algun día al Túnel, pero por ahora iba a pasar una larga termporada sin escalar ninguna montaña.

1 comentario:

Teresa dijo...

Anna:
Es una redacción correcta con unas pocas faltas de ortografía.
Quizá lo más criticable es que la historia es previsible, se adivina el final con demasiada facilidad.